Asía es un continente caracterizado por la tradición y al mismo tiempo por la modernidad e innovación, donde cada región guarda un sinfín de leyendas e historias por conocer. Tal es el caso de Bután, un pequeño país ubicado entre China e India, para ser precisos en las altas Montañas del Himalaya y cuyo nombre significa “la tierra del dragón del trueno”.
A pesar de su pequeño territorio, el cual apenas supera los 40 mil kilómetros cuadrados, y sus 800 mil habitantes, Bután ofrece una gran variedad de sitios para conocer. A través de un turismo sostenible, puedes encontrar desde bellos recintos con arquitectura tibetana, hasta excelentes lugares para comer y empaparte de la riqueza gastronómica de la nación.
Puedes comenzar tu aventura en el dzong más antiguo del país, ubicado en el valle de Paro. En este lugar podrás apreciar la magnífica escultura de Sidharta Gautama y deleitarás tu pupila con el impresionante Nido del Tigre, construido en el año de 1692 por monjes. Es probablemente el templo más visitado de la nación asiática, para llegar a él pasarás una travesía, ya que este recinto está situado en un acantilado a más de 3 mil metros de altura, pero no te preocupes, están contempladas diversas medidas de seguridad para que tu visita sea divertida y sin complicaciones.
Saliendo de Paro, tendrás la posibilidad de llegar al valle de Haa, sitio donde yacen los templos Lhakhang Karpo y Lhakhang Nagpo, de igual forma podrás apreciar la montaña más alta del país, llamada Monte Chomolhari, que posee más de 7 mil metros de altura.

Cabe destacar que en Bután existen más de 108 templos, mismos que son parte fundamental de su cultura y creencias, ya que este es un país budista. En Timbu, la capital de Bután, encontrarás Trashi Chhoe Dzong, uno de los templos más bellos e importantes del país.
Como viste, en oriente hay más destinos interesantes que China o Japón, así que no te pierdas la oportunidad de adentrarte en uno de los países más felices del mundo y enamorarte de su cultura milenaria, así como de sus bellos e irrepetibles paisajes.
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